Nuestro trabajo y metodología como entrenadores se fundamenta en la neurofisiología, entendiendo el comportamiento del músculo y su relación intrincada con el sistema nervioso central, así como aquellos sistemas de soporte que lo complementan:
- Sistema cardiovascular / cardiorrespiratorio
- Sistema hormonal
- Sistema enzimático
Dado que no podemos incidir directamente sobre estos últimos, debemos poner especial atención en el estímulo de nuestra musculatura.
Nuestro trabajo se fundamenta, asimismo, en la biomecánica, una visión desde la física y la ingeniería que permite entender cómo afectan o actúan las fuerzas externas (pesos) aplicadas sobre nuestro cuerpo.
Es importante entender que el peso no es el único factor que determina la carga final que llega a nuestras articulaciones, sino que hay otros factores igual o más determinantes que normalmente no se tienen en cuenta (ángulo de fuerza, brazo de palanca, aceleraciones, tipo de material, etc.).
Consideramos clave en un trabajo de fuerza tener conocimientos básicos sobre fisiología, anatomía y biomecánica, ya que es importante poder adaptar los perfiles de fuerza de los ejercicios (biomecánica) al perfil de fuerza muscular (fisiología y anatomía).