Rendimiento deportivo

RendimientoDeportivo

Nuestro sistema neuromuscular está en constante adaptación, buscando soluciones que nos permitan seguir realizando esfuerzo físico. Esta adaptación es una reacción inteligente de nuestro sistema, con el fin de compensar los desajustes que puedan existir, a través de nuevos patrones motores que permitan realizar las mismas acciones.

El problema está en que estas compensaciones no hacen más que enmascarar los desajustes, lo cual, con el tiempo, puede desencadenar en sobrecargas musculares, rigidez, tendinopatías, desgastes articulares y movimientos limitados.

¿Cómo actuamos?

A través de las técnicas de activación muscular podemos detectar posibles disfunciones y actuar de manera específica sobre ellas, reajustando y equilibrando nuestro sistema de fuerzas.

Una vez trabajadas las debilidades y equilibrado el sistema neuromuscular, incorporamos el entrenamiento de fuerza de alta intensidad que nos permite consolidar el trabajo, obteniendo la fuerza necesaria para alcanzar el máximo rendimiento deportivo.

ENCONTRAR LOS ESLABONES DÉBILES DE TU CUERPO Y POTENCIARLOS HARÁ QUE TU SISTEMA SEA MÁS EFICIENTE A LA HORA DE EXPRESAR FUERZA ANTE UN ESFUERZO FÍSICO.